UN TRABAJO MUY SUCIO



Charlie Asher es el joven dueño de un edificio en la ciudad de San Francisco, tiene una tienda de objetos de segunda mano que lleva junto con dos empleados, Lily, una adolescente gótica con gusto por lo sobrenatural y Ray, un policía retirado al que le encantan las maduritas asiáticas. Charlie está casado con Rachel, el amor de su vida, la única chica guapa e inteligente que se enamoró de él por ser normal, o todo lo normal que un “macho beta” puede llegar a ser. A Charlie le sonríe la vida hasta el día que nace Sophie, su hija. Justo cuando se dispone a irse a casa tras una larga noche de hospital, ve junto a la cama de su mujer a un extraño alto, negro y con un traje verde menta que asegura que no debería poder verle, pero Charlie lo ve.
Desde ese momento comienzan a suceder cosas muy raras: la gente cae muerta a su alrededor, le acechan cuervos gigantes que se posan en el tejado de su edificio y unas extrañas criaturas le insultan desde las alcantarillas. Efectivamente, Charlie ha sido reclutado para llevar a cabo un trabajo muy desagradable: la Muerte. Es un trabajo muy sucio, pero alguien tiene que hacerlo.

Antes de daros mi opinión personal sobre mi lectura de Un trabajo muy sucio, tengo que haceros partícipes de cómo entiendo yo las lecturas. Algunos libros, cuando los lees, los tirarías a la basura antes de llegar a la mitad de la lectura, han sido una pérdida de tiempo. Otros libros, sin embargo, los lees y es como tener una relación esporádica de una noche: pasas un buen rato y te olvidas de él, ha estado bien, pero no tanto como para repetir y que ocupe un espacio para libros mejores en tu estantería.
Otros libros te abofetean hasta tal punto que te cuesta avanzar, paras, reflexionas y vuelves a leer, porque el impacto se prolonga durante días y no quieres desprenderte de esa sensación que ha dejado en ti. Los disfrutas párrafo a párrafo y deseas muy fuerte que no termine, porque quieres seguir formando parte de la historia. Con estos libros podrías quedarte para siempre, y ocupan un lugar bien visible de tu estantería. Los recomiendas a tus mejores amigos y te emocionas al hablar de ellos.
Finalmente, hay libros que lees y al terminarlos sonríes, reavivan tu gusto por la lectura y deseas seguir leyendo otros libros del mismo autor, son lecturas que hacen que sigas amando los libros. Un trabajo muy sucio, en esta clasificación de los libros, sería el rey de este último tipo de libros.
– Permíteme que reformule la pregunta, entonces -dijo el señor Fresh-. ¿Nunca has estudiado las religiones orientales?
– Ah, las religiones orientales -contestó Charlie, fingiendo que antes había malinterpretado sus palabras-. Solo cosas del Discovery Channel, ya sabes, Buda, Shiva, Gandalf, los más importantes…
Lo descubrí gracias a un amigo y lo leí disfrutándolo hasta la última palabra. Era el primer libro de este autor que leía y me sorprendió su humor mordaz, irónico, provocador, divertido y crítico. Christopher Moore crea en Un trabajo muy sucio una atmósfera que estimula, provoca y te hace sonreír, y solo si quieres y estás preparado, te hará pensar. Lo leí por primera vez con 17 años y lo disfruté, me reí muchísimo y hasta hoy, lo recordaba como un buen rato. Pero ahora, con 29 he descubierto mucho más.
Charlie Asher es una persona corriente afrontando cambios, descubriendo que no existen los finales felices y que, en cualquier momento, un giro inesperado puede cambiar tu vida. Me ha resultado imposible no identificarme con él y con los problemas que conlleva la edad adulta, tener responsabilidades y no poder pensar únicamente en ti mismo.Charlie se aferra a aquellos que quiere y los protege, siempre dentro de las posibilidades de un “macho beta”.
Nos habla desde la ironía de problemas familiares por causa de la homosexualidad, de la tristeza y el desamparo que se siente al perder un ser querido, del consuelo que da la religión a algunas personas y de que la paternidad no es fácil. Trata con mucho tacto, pero siempre con su particular sentido del humor, un tema muy delicado como es la muerte.
A mí, personalmente, me ha gustado más que la primera vez que lo leí. He vuelto a disfrutar de Charlie, de Jane, del vecindario multicultural, de los cancerberos, de Minty Fresh y las Morrigans. Definitivamente, si queréis pasar un buen rato, este es tu libro.
Gatito -dijo.
Y el gatito cayó muerto en el acto.



Comentarios

  1. Este libro es brutal, es mi favorito de Christopher Moore junto con El Ángel más tonto del mundo.

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    1. Estoy de acuerdo! Aunque mi favorito, sin duda, es Cordero ;)

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  2. Me gusta mucho este autor, me lo apunto sin dudarlo. Me quedo por aquí de seguidora y te invito a mi blog si te apetece.
    Un abrazo.

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    1. Muchas gracias, Rocío! Moore es uno de mis favoritos y Un trabajo muy sucio la verdad es que es una risa. Espero que te guste, ya me contarás! Y te sigo también ;)

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